Sin más compañía que la de sí mismo, Israel Galván explora en Solo las posibilidades de su danza al desnudo. Tras una inicial indagación bailando solo y sin música en una parte de Tábula rasa, el bailaor lleva el concepto al extremo. Las referencias a Vicente Escudero son directas, pero el mundo que se experimenta es absolutamente nuevo. Israel se expone, convirtiendo la danza en un verdadero ejercicio sobre la identidad, con sus verdades y sus artificios, mostrando, hasta donde se puede, lo que es. Una buena oportunidad de contemplar la riqueza de su repertorio, siempre cambiante De asimilar el lenguaje creado por el artista y que ha abierto, seguramente, un nuevo mundo de posibilidades en la danza flamenca del siglo XXI.
Domingo, 9 de septiembre, 23:00 h.