“No sabéis lo que estáis diciendo. A Antonio Mairena hay que leerlo igual que se lee a Pericón de Cádiz. Olvidaros de la razón, olvidaros de nada que tenga que ver con la verdad histórica. Sus trabajos son poéticas. Son artistas los dos y, a su manera, los dos intentan legitimar su arte con sus palabras, ¿si es que eso os parece malo? Leyéndolos entendemos mejor su arte, sus propuestas de vida. La invención y el disparate tienen una proporción similar en los dos casos. ¿Y qué? También resuenan en sus letras propuestas artísticas muy diferentes. Con Mairena han sido capaces de hacer una comisaría de policía y con Pericón se sigue en el alterne. Pero es importante que sigamos leyéndolos a los dos. A ver si el flamenco va a ser ahora cosa solamente de las casas de discos.”
Pie de foto (galería): Quico Rivas con José Guerrero en una exposición de Costus.